Por Luis Nolla

San Luis, MO. El sábado por la tarde la ciudad de San Luis vivió la fiesta más grande en su historia. La causa de la fiesta es bien simple: Los Blues estaban celebrando su primera parada como campeones del Stanley Cup. Se estima que más de 300,000 atendieron la celebración que empezó por la calle Market y terminó debajo del arco.

Los jugadores no se quedaron en los vehículos que estaban transportándolos hacia el final del desfile por mucho rato porque quisieron compartir con los fanáticos que estaban alrededor de ellos.

Ayer yo camine la ruta, pero no con los jugadores. Yo fui caminando con los fanáticos. Hablando con algunos de ellos unas de las cosas que me dijeron era que todavía no podrían creer que ellos estaban en un desfile de campeonato de los Blues. Yo puedo entender eso porque el esta temporada empezó con expectaciones altas, pero después el equipo llegó a su punto más bajo cuando despidieron a Mike Yeo en noviembre y terminó siendo el equipo campeón de la NHL.

Otra cosa que me estaban diciendo los fanáticos era que los Blues pueden ganar varios campeonatos más pero el campeonato del 2019 siempre va hacer el mejor porque fue el primero que el la franquicia obtuvo en sus 52 años de existencia.